sábado, 31 de diciembre de 2011

Autores Matanceros, o Escritores de La Matanza, o como gusten llamarnos (24 de septiembre de 2008 - …)

!Detente por piedad, pluma, no quieras
que abandone sus armas el idiota!
Almafuerte.

La historia de la literatura en el partido de La Matanza se remonta, por lo menos, al poeta Pedro Bonifacio Palacios, conocido con el seudónimo de Almafuerte (1854-1917), y al dramaturgo Gregorio de Laferrere (1867-1913). Aunque es muy probable que hayan existido manifestaciones anteriores de naturales y vecinos de este pago en torno a las letras, la ciencia, el periodismo o el panfleto, expresiones extraviadas en algún archivo, o simplemente perdidas para siempre.
El último siglo no ha sido muy diferente en cuanto al registro de la actividad literaria. Al día de hoy no hay un archivo oficial que guarde las obras de los escritores locales, permitiendo su conservación y consulta por futuras generaciones. La conservación del nombre de un autor ha dependido de la factibilidad comercial que pueda interesar a una editorial a reeditarlo, o a los esfuerzos de bibliotecas populares y coleccionistas particulares. Sin embargo, esos esfuerzos sólo sirven para salvar del olvido a un puñado de plumas, una muy pequeña muestra del universo total.
La historia que voy narrar es apenas una diminuta fracción de esa larga y rica historia no registrada. Comienza el 24 de septiembre de 2008, en la plaza Gral. San Martín de San Justo. Ese día, a las 11 de la mañana, se inauguró la 1º Feria Municipal del Libro.
Llegué a esta feria con mis libros en la mochila, con la única intención de hallar a alguien a quien mostrárselos, quizás hasta regalar algunos. Y me encontré con el stand de Autores Matanceros. Su fundador era Omar Celiz, poeta, y hasta unos meses atrás subsecretario de cultura en el municipio. Se trataba de un espacio para la difusión y venta de las obras de los escritores locales, abierto a todo el que quisiera participar.
Esta feria, y en particular este stand, fueron una buena ocasión para que los autores nos hiciéramos conocer por el público. Pero también fue la gran oportunidad de conocernos entre nosotros. En esa primera feria de 2008 conocí a Blas Barragán, Alberto Fontana, Paula Pimentel y Gloria Peluca, entre otros, autores con historias previas distintas, algunas extensas, otras más recientes, todos actores activos de las letras matanceras.
Para la segunda edición de la feria municipal, en 2009, fue mayor el número de autores que pude conocer. Christian Malattia, Adela Salas, Irene Gardes, Roberto Cisterna, Elisa Peñaloza, Marta Pizzo, sólo por nombrar algunos. Y nos es por azar, como se verá más adelante.
Desde 2007 se realiza en Virrey del Pino otra feria del libro, organizada por una biblioteca popular. En octubre de 2009, junto a Christian Malattia, referente de Tapiales, donde ya existía un circuito cultural que incluía cafés literarios, muestras de arte, recitales y hasta un festival internacional de cine corto, arrancamos con un stand en la 3º Feria del Libro en Virrey del Pino. Autores Matanceros había dejado de ser un fenómeno circunscrito a la feria municipal para empezar a tomar vida propia.
Ya en 2010 la agenda empezó a cargarse, y las líneas a divergir y converger en formas cada vez más complejas. La 3º Feria Municipal se mostró como un éxito de convocatoria, actividades y ventas. Otra vez se dio la oportunidad de conocer autores. Carlos Rigel, Lorena Fernández, Elsa Montenegro, Nidia Requena son algunos de ellos. La 4º Feria de Virrey del Pino atrajo a más participantes, permitiéndonos hacer pie definitivamente en el sur de La Matanza. En noviembre, Tapiales tuvo su 1º Feria del Libro Independiente, organizado por el Galpón Cultural Tapiales, que también realizaba mensualmente un Poesía Bar con micrófono abierto, entre sus participantes habituales estaban Christian Malattia, Valeria De Vitto y Elizabeth Molver.
En octubre de 2010, Elisa Peñaloza, Lorena Fernández y Adela Salas, entre otros autores, junto a un amplio número de artistas de diferentes disciplinas, dieron comienzo a los Encuentros Culturales en El Altillo, evento mensual que incluye entre sus actividades presentaciones de libros y escritores. Por allí pasaron Omar Celiz, Irene Gardes, Roberto Cisterna, Carlos Correa, Marta Pizzo, Alberto Fontana y muchos más.
Paralelamente al crecimiento de Autores Matanceros, se dio una mayor difusión de nuestros trabajos en los medios locales. Uno de los que se acercó fue el programa radial Cultura desde el pie, conducido por Emilio González. A través de éste conocí a José Paredero, fundador y activo participante de la Besana, grupo literario que había trabajado por las letras desde el año 1994, en tiempos difíciles para la cultura. Entre sus miembros habían estado Marta Pizzo y Héctor Picallo, por citar algunos. Produjeron tres antologías que incluyeron a escritores experimentados y a otros que se formaron en el seno del grupo.
Las ferias también nos permitieron conocer las bibliotecas populares, y a la gente que hace posible su funcionamiento. En algunos casos, los bibliotecarios son autores, como Angélica Maldonado, presidente de la Biblioteca Popular Almafuerte de San Justo. En otros casos, las bibliotecas aglutinan a los autores de las localidades donde están asentadas, como las dos bibliotecas de Virrey del Pino (Madre Teresa y Virrey del Pino) que realizan multitud de actividades, o como la Biblioteca Almafuerte que editó una antología en 2010 con la participación de sus colaboradores, o la Biblioteca Popular Rotaria de Isidro Casanova, que realiza cafés literarios y encuentro de lecturas para los escritores casanovenses.
Justamente, consultando los libros en la biblioteca Rotaria fue que me di cuenta de la enorme falta que hace un registro de la literatura local, al encontrar los libros de Rubén Uriol, escritor que había publicado tres volúmenes en vida y que había fallecido en 2006, sin que yo llegara a conocerlo, a pesar de que su domicilio estaba a ocho cuadras de mi casa.
Rubén Uriol había sido fundador, junto a Fernando Rondino y Carlota Sayos, de la Sociedad de Poetas y Escritores de La Matanza, organización que desde 1990 trabajó por las letras matanceras, con encuentros de lectura, concursos literarios, y la publicación de una antología editada en 2007, que incluía entre sus participantes a Alberto Fontana, autor con el que yo he compartido más ferias de las que puedo recordar.
Como se ve, aquel stand en aquella primera feria del libro no sólo abrió posibilidades de progreso para el futuro, sino que también nos ha permitido indagar el pasado, conocer nuestras raíces literarias.
A través del Programa Cultura desde el pie, conocí a Anahi Cao, a través de quien conocí a Patricia Verón, miembro de La Luna Que, grupo literario fundado por Omar Cao y Hugo Salerno, que desde 1975 trabaja por letras en La Matanza y fuera del distrito, editando la revista La luna que se cortó con la botella, propiciando la publicación de gran cantidad de libros y otras actividades culturales.
En agosto de 2011, Carlos Rigel, José Paredero, Andrea Dagnillo, Emilio González y yo iniciamos el Café Literario Rincón de Letras, en el Centro Cultural Congett de San Justo. Mensualmente nos reunimos a disfrutar de ponencias y presentaciones de libros, a difundir nuestras obras, a expresarnos, debatir, compartir experiencias y planificar actividades que resulten en un crecimiento de las letras en
La Matanza y el Oeste del Gran Buenos Aires. Por el micrófono pasaron Blas Barragán, Alicia Benítez, Gloria Deluca, Alejandro Enrique, Marilaria Estévez, Miguel Feniello, Alberto Fontana, Victor Ibáñez, Silvia Mielnicki, Elsa Montenegro, Gabriel Moreno, Oscar Paniagua, Perla Patrón, Héctor Picallo, Paula Pimental, Ángel Resine, Adela Salas y José Zufiaurre, entre otros, además de los muchos autores que se acercaron con sus libros, sus ideas y sus ganas de participar.
A través de Rincón de Letras conocí formalmente al Centro de Estudios Históricos de La Matanza, o CEHLaM. En realidad, conocía de antes a algunos de sus miembros, pero aquella fue la oportunidad de empezar a colaborar entre el CEHLaM y Rincón de Letras. Ellos son un grupo de historiadores, actores activos en la recuperación de la historia de nuestro partido, de indagar en nuestras raíces en el más amplio sentido de la palabra. Y esa indagación se convierte en libros.
El 2011 también tuvo una agenda extenuante. La 1º Feria del Libro Independiente de Laferrere, la 4º Feria Municipal del Libro, la 5º Feria del Libro en Virrey del Pino, la 1º Feria del Libro Jeanne Simons de Isidro Casanova, la 2º Feria del Libro Independiente de Tapiales. Más puestos de venta en las ferias de artesanos de Ramos Mejía y San Justo. Más Rincón de Letras que no para de crecer. Más todo lo que debe estar sucediendo ahora, mientras escribo estas palabras, sin que lo sepa, sin que quede registrado más que en los corazones de los protagonistas.
La tarea para el futuro es titánica. Pero me da valor saber que estoy rodeado de titanes.

2 comentarios:

  1. Excelente, correcta y necesaria reseña de lo hecho y lo por hacer. Lo mejor siempre está por delante, nunca en lo pasado, que aunque no creamos en esas palabras debemos hacer como que creemos en ellas para seguir. ¡Salut y trinchera!

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  2. Hola Víctor,mi nombre es Nicolás Camargo Lescano. Leí esta nota y me pareció muy interesante. Quería preguntarte si existe la posibilidad de hacerte una entrevista para el periódico El1, de la Universidad Nacional de la Matanza,con motivo de la próxima Feria del Libro que se hará en la Matanza. Te dejo mi contacto: camargolescano@hotmail.com. Si te interesa la propuesta mandame un mail a esta dirección así nos ponemos en contacto.Que tengas buen día!

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